30/10/2013
EL VELADOR (2011), DE NATALIA ALMADA
Proyección: miércoles, 30 de octubre de 2013 / 20.30h / Filmoteca Regional Francisco Rabal / Sala B
Entrada: 2,50€. Natalia Almada participará en un debate con el público tras la proyección.
SINOPSIS
Dentro de la historia de la arquitectura y el urbanismo contemporáneo existe un espacio al que no se le ha prestado toda la atención que requiere; un espacio hasta cierto punto eclipsado o negado socialmente y, sin embargo, un espacio fundamental: el cementerio. La disposición de las calles, su estructura, la organización arquitectónica de los nichos, tumbas y mausoleos. Las referencias y las influencias de la arquitectura de los vivos a la hora de organizar y edificar el «hogar eterno» de los muertos o las maneras en que se cuidan y se conservan cada uno de esos espacios constituyen, sin duda, un campo de análisis que permite comprender no sólo cómo se organiza o se entiende el mundo de ultratumba, sino, por encima de todo, cómo se asume y se comprende el horizonte de los vivos. Cada cementerio habla de la cultura en la que se integra, de sus valores, de sus principios, del modo en que se dispone el poder y la miseria, el olvido y el recuerdo.
El velador, el extraordinario largometraje documental de la directora de cine mexicana Natalia Almada, se presenta como una aproximación respetuosa y sobrecogida a uno de los cementerios más emblemáticos de nuestro tiempo: el camposanto narco de Culiacán, ubicado en el estado mexicano de Sinaloa. Un lugar en el que reposan para siempre, en grandes mansioleos, valga el neologismo, algunos de los capos más conocidos y respetados del narcotráfico mexicano. Almada se acerca con su cámara, de un modo sereno, respetuoso e impactado, al crecimiento rápido y constante de un espacio que se extiende al ritmo de noticias mediáticas en las que los baleados, los ejecutados o los descuartizados se suman a una lista que parece no tener fin.
El velador es la mirada sosegada que Natalia Almada realiza a este espacio inquietante pero, sobre todo, a sus verdaderos protagonistas: todos aquellos trabajadores que, situados al margen del gran conflicto que gira en torno al narcotráfico, tratan de sobrevivir cada día con un trabajo digno.